Y esto fue todo?
Asi, insatisfecho, como decepcionado me senti respecto al dia que no terminaba. Recorri mi conversacion, aunque telefonica con un viejo amigo sobre proyectos en gestacion, un almuerzo y cena reconfortantes y majestuosos; pense en otr@s viej@s amig@s a quienes no habia visto, o con quienes no habia hablado...pero de quienes supe de sus existencias. Volvi a sentir el agua caliente de la ducha del mediodia, las palabras dulces de mi madre que vencia heroicamente una batalla contra la enfermedad, contra la vida...Mi bolido a pedales rojo me asentia para el paseo del dia de mañana y una pantalla calorica me desabrigaba...
Asi, insatisfecho, como decepcionado me senti respecto a mi deseada y aliviada soledad, un dia de no-hacer casi soleado y mi complicada situacion material...
Pero, que falta de percepcion! mis aturdidos sentidos no me informaban de mi condicion de afortunado al no plegarme correctamente a la simplicidad de mis dias. He aqui la llave que abre las compuertas de ese palacio de abundancia que que se encuentra en nuestros corazones tras las montañas del ego y cruzando los rios de la codicia.